En poco tiempo pasarán a la historia las tradicionales guías de papel diseñadas para estudiar antes de la presentación de los exámenes de ingreso a preparatoria o universidad. El Centro Nacional de Evaluación (Ceneval) promoverá este año el uso de guías interactivas en formato de disco compacto que contienen explicaciones sobre las respuestas.
La diferencia entre las guías tradicionales y las llamadas "formativas" es que éstas últimas permiten a los usuarios una interacción dinámica y contienen explicaciones inmediatas en función del acierto o el error.
El proyecto responde a una época de uso intensivo de la informática y de la mayor presencia de una cultura visual, pero tiene la desventaja de que sólo podrán usar esta herramienta quienes tengan acceso a una computadora.
Cuando los estudiantes consulten su guía, no encontrarán papeles, sino textos y material gráfico digitalizados que les permitirán razonar por qué una respuesta es correcta o equivocada.
Y en caso de cometer algún error, hallarán coloridos textos como: "Es la segunda ocasión que te equivocas con esta pregunta, te recomendamos poner mayor atención. Es incorrecto por... Observa con cuidado la relación que se está solicitando realizar, ya que esta respuesta es errónea".
Cada año el Ceneval aplica cerca de 800 mil exámenes de ingreso a educación media, superior y de egreso de licenciatura, y por tanto elabora diversos tipos de guías para los sustentantes.
Las guías formativas son la nueva versión. Durante sus primeros ocho años de operación, el centro elaboró las guías impresas en papel; en 2003 diseñó las primeras guías interactivas en formato de disco compacto, y las formativas las hizo en la segunda mitad de 2004.
El proyecto surgió en 2002, cuando en una encuesta aplicada a 659 egresados de secundaria el Ceneval encontró que la mayoría solicitaba conocer mayor información sobre las respuestas correctas e incorrectas de las pruebas, porque en ocasiones se quedaban con la fuente de confusión, además de que pedían guías más interesantes y atractivas.
A partir de esta recomendación, el centro elaboró un nuevo instrumento para la preparación de los aspirantes del examen de ingreso a bachillerato denominado "guías formativas".
En esta guía, además de indicar las respuestas correctas de los reactivos, se incluyen las fundamentaciones de cada una de las opciones de las preguntas, de forma que cada una de las posibles respuestas contiene explicaciones inmediatas en función del acierto o el error.
De acuerdo con un reporte interno del Ceneval y una investigación publicada en el libro La evaluación de la educación en México, las guías son una herramienta adicional para los aspirantes a presentar el examen y no sustituyen la preparación obtenida en la escuela, pero sí permiten una mejor autopreparación de los concursantes.
Carmen Tagüeña, María Garza Vigil y Eduardo Robledo, especialistas del centro de evaluación, explican que la intención es que las guías formativas interactivas sean "más didácticas" que las tradicionales impresas, para facilitar y fortalecer la adquisición de conocimientos, habilidades y estrategias de aprendizaje de los usuarios.
El método de estudio consiste en que la persona elija una opción de respuesta, y si se equivoca recibirá información de por qué la respuesta no es la adecuada, y no podrá pasar a la siguiente pregunta hasta no acertar a la respuesta correcta, pero mientras tanto podrá aprender de sus errores.
En caso de elegir la respuesta correcta se le proporciona información relacionada con el contenido de ésta, con el propósito de reforzar su aprendizaje e incluso ampliar sus conocimientos.
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